El mundo de los homenajes relojeros está lleno de opciones más o menos inspiradas, pero pocas tan equilibradas como este Pagani Design PD-1651. Inspirado en el icónico Rolex Yacht-Master, este diver económico no solo sorprende por su estética elegante y deportiva, sino también por su construcción y especificaciones. Con un precio que ronda los 60 euros, se convierte en una de las mejores opciones si quieres un reloj automático con presencia y carácter sin romper la hucha.
El Pagani PD-1651 es un reloj tipo diver, con resistencia al agua de 100 metros, lo que lo hace apto para duchas, natación o actividades acuáticas recreativas, aunque no para buceo profesional. Aun así, está claro que este modelo está diseñado para transmitir ese espíritu de herramienta robusta de buceo con un toque de lujo gracias a su acabado en oro rosa.
En su interior late un Seiko NH35, uno de los calibres automáticos más conocidos del mercado. Se trata de un movimiento fiable, con una frecuencia de 21.600 alternancias por hora, precisión de ±10 segundos diarios y una reserva de marcha de 40 horas. El NH35 permite remonte manual y parada de segundero, características muy apreciadas en relojes de este rango de precio.
Acero inoxidable para la caja, goma negra para la correa. Esa es la receta que usa Pagani para mantener el reloj ligero, resistente y cómodo. El resultado es un reloj que se siente robusto, con buen peso (105g), pero sin llegar a ser incómodo ni tosco en muñeca.
La correa, como ya hemos nombrado, es de goma negra. Del diseño no hay mucho que decir, ya que es exactamente igual que la del Rolex al que hace homenaje, pero cabe destacar que tiene un ranurado interno para evitar el sudor. La hebilla es del mismo material y color que la caja pero no va firmada con el logo de la marca, detalle que hubiera sido de agradecer.
La caja del PD-1651 es sencillamente espectacular para su precio. Mide 40 mm de ancho, 48.5 mm de largo y tiene un grosor de 13 mm, medidas contenidas para un diver. El acabado es cepillado en la parte superior y pulido en los laterales, y el tono oro rosa le da una presencia elegante y atrevida. Las aristas están bien rematadas y no hay rebabas ni cortes agresivos. Es un reloj que, al ponértelo, no parece de 60 euros.
Como no podía ser de otra manera, la corona es roscada y firmada con el logo de la marca. Tiene tres posiciones: cuerda manual, ajuste de fecha y ajuste de hora. La operación es precisa y tiene un buen tacto, sin holguras ni sensaciones baratas.
El bisel es uno de los puntos fuertes del reloj. Fabricado en acero inoxidable color oro rosa con inserto cerámico negro, tiene 120 clicks y numeración arábiga grabada. El giro es unidireccional, como manda el estándar en los divers, aunque no ofrece mucha resistencia, algo a tener en cuenta si buscas precisión en cada click. Aun así, estéticamente está muy logrado y no desentona con el conjunto.
El dial es negro con efecto rayo de sol, que aporta dinamismo y elegancia al reloj. En él encontramos la marca, la palabra "Automatic" y la resistencia al agua, todo de forma bastante discreta y bien equilibrada. A las 3h encontramos el fechador con cíclope, detalle muy del estilo Yacht-Master. Los marcadores aplicados son rectangulares en 6 y 9, triángulo invertido en las 12 y círculos en el resto de posiciones. Todos ellos con un marco cromado del mismo color que la caja y rellenos de lumen. Un diseño clásico pero efectivo.
Las agujas están muy bien resueltas. Tenemos una horaria tipo Mercedes, minutera estilo espada y segundero tipo piruleta contrapesado, todos ellos con bordes en oro rosa y rellenos de lumen azul. El contraste con el dial es excelente, y aportan un extra de legibilidad y estilo.
Si hay un punto débil en este reloj, es el lumen. Aunque está presente en manecillas y marcadores, su intensidad y duración son bastante pobres. Si esperas un brillo prolongado, este no es tu reloj. Pero sinceramente, en este rango de precio, no es un drama.
Otro gran acierto es el cristal de zafiro sintético, algo que no siempre se ve por debajo de los 100 euros. Queda perfectamente enrasado con el bisel, algo que va a evitar en un futuro que se lleve algún golpe o algún arañazo fácilmente. Respecto al cíclope antes nombrado que descansa sobre él, he de decir que no soy muy fan, pero es cuestión de gustos.
La tapa trasera es roscada, con ventana de exposición que deja ver el movimiento en funcionamiento. Algo que siempre se agradece, sobre todo si te estás iniciando en el mundo de los automáticos. Formando un anillo alrededor de ella y sobre un acabado cepillado, se puede leer la marca del reloj, la resistencia al agua y el material del que está hecho.
Y por último, toca hablar del precio. Este Pagani lo puedes encontrar alrededor de unos 60 euros, aunque pueden ser menos si pillas alguna oferta en Aliexpress. Aunque tiene alguna carencia como el lumen, por este precio me parece un muy buen reloj, sobre todo teniendo en cuenta que equipa un calibre japonés como el NH35 de Seiko y la calidad de materiales que utiliza.